Cómo tener el agua de la piscina cristalina

Cuando montas una piscina en tu casa, vas a tener un espacio de relax y diversión, eso sin duda. Pero no solo se trata de instalar una piscina, sino que requiere un mantenimiento adecuado y regular para que esté siempre perfecta.  

A continuación, te dejamos los pasos que necesitas realizar para que el resultado sea el deseado. 

Qué tengo que hacer para que el agua de mi piscina esté cristalina

Nos llegan muchas consultas de clientes preocupados porque el agua de su piscina no está clara para ver cómo pueden solucionarlo. Seguir estos pasos es fundamental para tener el agua de la piscina cristalina: 

1. Filtración Regular: La clave para tener un agua cristalina en la piscina es mantener el sistema de filtración en buen estado. Asegúrate de que la bomba y el filtro estén funcionando correctamente. Filtra el agua durante al menos 6-8 horas al día para eliminar impurezas, en dos tantas: filtra unas 3-4 horas a primera hora y 3-4 horas a media tarde o por la noche. En caso de que veas que el agua no está limpia del todo, tendrás que aumentar las horas de filtración.  

Limpia el filtro de la piscina según las recomendaciones del fabricante. Un filtro obstruido no cumple eficientemente su función, lo que puede afectar la claridad del agua. 

2. Equilibrio Químico: Controla regularmente los niveles de pH, alcalinidad y cloro en el agua. Un pH equilibrado (entre 7.2 y 7.6) evita irritaciones en los ojos y la piel. La alcalinidad correcta y niveles adecuados de cloro son esenciales para prevenir el crecimiento de algas y bacterias. En caso de que tomes las mediciones y necesitas regular el pH, existen productos para aumentar o reducir. En cuanto a los niveles de cloro, el uso de los químicos adecuados a tu piscina y volumen de agua de manera regular, garantiza tener el agua desinfectada y cristalina. 

3. Limpieza Frecuente: Elimina los residuos superficiales con una red de mano y aspira el fondo de la piscina para evitar la acumulación de suciedad. Los restos orgánicos como hojas e insectos pueden descomponerse y afectar la calidad del agua.  

Recomendamos el uso de una cubierta isotérmica en verano cuando no se esté utilizando la piscina. Esto, además de ayudar a mantener el agua más limpia, te ayudará a reducir el uso de químicos y la evaporación de agua. En invierno, pon una cubierta específica para esa época del año.

4. Cloro de choque: Realiza un tratamiento de choque con cloro cada cierto tiempo. Esto implica agregar una cantidad extra de cloro al agua para eliminar bacterias y otros microorganismos. Hazlo especialmente después de eventos con mucha afluencia de personas o al inicio y final de cada temporada. 

5. Mantén el Entorno Limpio: Evita que la suciedad del entorno entre en la piscina. Limpia el terreno de malas hierbas alrededor de la piscina. Antes de montar la piscina, protege el suelo con un tapiz para facilitar este paso. Además, pide a los bañistas que se enjuaguen antes de ingresar para reducir la cantidad de aceites y cremas en el agua. 

6. Control de Alguicidas: Si utilizas productos químicos de varias acciones, suele incluir alguicida. Pero si no es tu caso, utiliza alguicidas regularmente para prevenir el crecimiento de algas. Estas pueden dar un aspecto verde o nublado al agua. Siguiendo las indicaciones del fabricante, añade alguicida para mantener a raya estos organismos no deseados. 

Siguiendo estos simples pasos, puedes asegurarte de que el agua de tu piscina se mantenga cristalina y lista para disfrutar en cualquier momento.